Texto y foto pertenecen al blog http://victoria-diaadia.blogspot.com/
Y aquí os dejo otro riquísimo helado para que lo preparéis el fin de semana y os aseguro que es muy fácil de hacer, lo más difícil, con estas temperaturas, ha sido hacer la fotografía sin que se derrita totalmente.
La receta es de Pilar de La Cocina de Lechuza, el resultado excelente como todas sus recetas.
Ingredientes:
600 g de cerezas (500 + 100)
1 cucharada de azúcar
2 envases de 200 ml de nata para montar con un mínimo de 35% de materia grasa
1 tarrina de queso Philadelphia Light de 200 g
10 (4 + 6) cucharadas de azúcar glass
2 gotas de colorante rojo (opcional)
Elaboración:
Lavamos las cerezas y las deshuesamos, las espolvoreamos con la cucharada de azúcar y la dejamos reposar durante media hora aproximadamente.
Trituramos con la batidora 500 g de cerezas y reservamos el resto para añadirlas más tarde, finamente troceadas, así al degustar el helado nos encontraremos con pequeños trocitos de fruta (si no os agrada esto podéis triturar los 600 g)
Agregamos la tarrina de queso Philadelphia y las cuatro cucharadas de azúcar glass y batimos hasta que esté bien mezclado.
Aparte montamos los dos envases de nata junto con las 6 cucharadas de azúcar glass restantes.
Incorporamos la nata montada a la mezcla anterior y vamos envolviendo hasta que quede perfectamente incorporada. La mezcla, a pesar del fuerte color de las cerezas quedará un poco pálida, si queréis podéis poner un par de gotas de colorante rojo para darle un color más vivo y atractivo.
Para finalizar incorporamos los 100 g de cerezas troceadas que habíamos reservado y mezclamos con cuidado.
Siguiendo el consejo de Pilar puse la mezcla en el congelador en un recipiente metálico, para que no se formasen cristalitos y pasadas dos horas batí la mezcla con unas varillas metálicas.
El resultado fue estupendo, un rico y cremoso helado con un claro sabor a cerezas, además no queda muy dulzón por lo que si sois muy golosos podéis aumentar la cantidad de azúcar, para mi gusto estaba perfecto.